OTOÑO. Mar de nubes.

Mar de nubes
OTOÑO. Mar de nubes.

El mar de nubes

Hay momentos en los que la montaña se eleva por encima del cielo cotidiano, y al mirar hacia abajo, en lugar de tierra, se contempla un océano blanco y silencioso. Es el mar de nubes, ese fenómeno mágico en el que la niebla se acumula en los valles y crea una ilusión de olas suaves, inmóviles, como si el mundo se hubiese invertido.

Desde lo alto, las cimas parecen islas solitarias flotando en una inmensidad algodonosa. Todo es silencio, como si el tiempo se hubiese detenido. La vista se pierde en la blancura infinita, y por un instante, el alma se siente suspendida entre el cielo y la tierra.

El mar de nubes no solo es un espectáculo visual: es una experiencia que invita a la contemplación. Nos recuerda lo pequeño que somos ante la naturaleza, y al mismo tiempo, lo afortunados que podemos ser al presenciar su belleza efímera.